Robustas, con un gran paso libre y fabricadas en termoplástico y acero inoxidable, las válvulas de vacío para alcantarillado están diseñadas específicamente para esta función.
Además, resisten perfectamente los gases corrosivos propios del alcantarillado.
FLOVAC es una empresa que se dedica exclusivamente al diseño e instalación de sistemas de alcantarillado por vacío. Las válvulas de interfase de vacío que fabrican otorgan rentabilidad y eficacia, lo cual las posiciona como unas de las mejores del mercado.
Implementación de las válvulas en los sistemas de alcantarillado por vacío
El sistema de alcantarillado por vacío es un proceso que utiliza el diferencial de la presión del aire y la gravedad para transportar rápidamente las aguas residuales en una red de tuberías esencialmente vacías desde los pozos de recogida a un tanque de recolección central y de allí a un punto de descarga. Este es utilizado en lugares como puertos deportivos, edificios verdes, hospitales, zonas industriales, entre otros.
En estos sistemas, es imprescindible la presencia de una válvula de vacío.
En lo que a su rol en el sistema respecta, el pozo de recolección contiene la válvula de vacío FLOVAC de 90 mm que hace de interfase entre la atmósfera proveniente de las líneas de gravedad y la presión negativa en la red de vacío creada por las bombas de vacío en la Estación de Vacío. De esta manera, una vez han entrado 40 litros en el pozo desde la línea de gravedad, la presión del aire en el controlador de las válvulas activa la válvula para abrirse, permitiendo a las aguas residuales y después al aire entrar en la red de vacío a una velocidad de entre 4 y 6 metros por segundo.
Válvulas de vacío certificadas
Las válvulas de interfase de vacío disponen de un controlador que las mantiene abiertas 1-2 segundos después de haber vaciado la arqueta. El aire ayuda a transportar las aguas residuales hasta el punto de vertido y además asegura que no se produzcan atascos al cerrar el pistón, ya que la válvula cierra en seco.
Las válvulas de vacío de FLOVAC poseen la particularidad de no requerir ninguna electricidad en el pozo de recolección, ya que la energía es proporcionada por la propia red de vacío. A su vez, su vida útil se extiende a 50 años y cuenta con un diámetro interno de 78 mm, el cual reduce aún más las probabilidades de taponamientos.
Las válvulas de vacío Flovac han sido certificadas por un laboratorio independiente conforme tienen una vida útil superior a los 500.000 ciclos (aperturas/cierres). En 2011 una válvula en funcionamiento real completó más de 1 millón de ciclos en una instalación en Australia Occidental, sin piezas reemplazadas y sin ningún informe de pérdida de servicio por parte de los operarios durante ese tiempo. Estas especificaciones únicas y pruebas empíricas las posicionan como una de las mejores válvulas utilizadas en el mundo.